- Fresco: En un lugar fresco y seco. De una pieza, sin rebanar. En una panera o una bolsa de tela de lino o de algodón. Si no, puedes usar la bolsa de papel Kraft en la que recibes la hogaza. En este último caso te recomendamos que, a partir del 4º día, rebanes el pan sobrante y lo congeles.
- Congelado: Rebana el pan y guárdalo en el congelador cerrado en la bolsa de papel Kraft en la que lo recibes. También es posible guardarlo en bolsas ZIP que se pueden reutilizar muchas veces. ¡Por favor, evita tirarlas tras el primer uso!
- No recomendamos: Meter el pan en la nevera ni conservarlo en una bolsa de plástico… El pan sigue “respirando” y es imprescindible reservarle un lugar donde pueda hacerlo.
See how your comment data is processed.
This site uses User Verification plugin to reduce spam.